Fractales y otras fracturas literarias
martes, 8 de junio de 2010
Oh las cuatro paredes de la celda.
Ah las cuatro paredes albicantes
que sin remedio dan al mismo número.
Criadero de nervios, mala brecha,
por sus cuatro rincones cómo arranca
las diarias aherrojadas extremidades.
Trilce, César Vallejo
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio