miércoles, 12 de octubre de 2011

Elecciones democráticas

La sombra del sol en mi mano
no habló por televisión, ni
la de mi mano en el sol, ni
el niño que pide en la calle
habló por televisión. Toca
un acordeón roto con
su hueso constante.

Valer la pena, Juan Gelman